Se investigaba el móvil del crimen, ya que los delincuentes escaparon sin robar ninguna pertenencia de la víctima, informaron fuentes policiales.

Un joven estudiante fue asesinado a balazos por dos hombres en moto cuando regresaba de la facultad a su casa, en el partido bonaerense de de Quilmes. Se investigaba el móvil del crimen, ya que los delincuentes escaparon sin robar ninguna pertenencia de la víctima, informaron fuentes policiales.
El hecho ocurrió el jueves alrededor de las 18, cuando la víctima, Miguel Angel Paccor, de 26 años, bajó de un colectivo en el barrio La Cañada, de Quilmes. Fue entonces que el joven, quien estudiaba ingeniería electrónica en la Universidad de General Sarmiento,en Los Polvorines, fue interceptado por dos delincuentes armados a bordo de una moto, quienes le dispararon varias veces.

   Paccor cayó al suelo tras los balazos, y los atacantes volvieron a dispararle, para luego escapar sin robar nada. Guillermo, uno de los hermanos de la víctima y que vive a dos cuadras del lugar, contó a TN que acudió con su auto luego de que un vecino le avisara, cargó a Miguel y lo llevó al hospital de San Francisco Solano. Paccor ingresó fallecido, con múltiples heridas de arma de fuego en tórax, abdomen y hombro derecho.

   "Se iba a las nueve de la mañana y volvía nueve y media de la noche, iba de la casa a la facultad" , contó Guillermo de su hermano menor. La policía en principio descarta la hipótesis de robo, ya que los delincuentes no sustrajeron ninguna pertenencia. Sin embargo, Cristian, un familiar del joven, relató que los delincuentes "le quisieron sacar el celular" y "se ve que se resistió". La madre de Paccor declaró que su hijo no le "hacía mal a nadie" y que "era un pibe buenito". "Lo único que quería era estudiar, estaba haciendo de todo para llegar a ser ingeniero electrónico, se iba hasta Los Polvorines a estudiar, con lo justo en la (tarjeta) SUBE, porque yo perdí a mi esposo hace nueve meses y no cobro (pensión) todavía", y agregó: "Es algo salvaje lo que hicieron. ¿Por qué tanto, cuatro tiros?". Su hijo "cuando podía hacía changuitas de electricidad, colocaba cámaras con el cuñado", o trabajos de "albañil", todo "lo que sea para tener el boleto". "Tenía siempre la mochila cargada de cositas, y decía: 'Mami, yo no se las voy a dar a estos vagos, que se vayan a laburar, a mi no me van a sacar las cosas'", a lo que la madre le contestaba: "Si a vos te hacen algo, dale las porquerías esas".