Fue en cercanías de Cavia y Washington, en la zona más humilde de Parque Casas. Su madre dio la cara y contó lo difícil que fue la vida del muchacho

"Mi hijo no era un santo. No voy a decir lo contrario porque esté muerto. Era adicto y vendía para Juan (el transa que le proveía la droga), pero ellos lo mataron mal". La síntesis de la vida de Brian Moreno fue puesta en palabras por Viviana, su madre. Al pibe de 21 años lo mataron de tres balazos ayer de madrugada en inmediaciones de Cavia y Washington, en el barrio Parque Casas y a metros del Puente Negro, junto al arroyo Ludueña. "Mi hijo estaba en la esquina con otros pibes, lo mandaron a comprar en el búnker (de Washington y Cavia) y cuando volvía lo corrieron con un auto y le pegaron tres balazos", explicó la madre de Brian el hecho que investiga el fiscal de la Unidad de Homicidios Miguel Moreno.

La historia de Brian, al que todos en el barrio conocían como "La pelu", es una más en el contexto de una generación de jóvenes expuesta a su destino en los barrios más empobrecidos de Rosario. Lugares donde la dinámica de la vida suele, y puede, ser manejada por el vendedor de drogas. Brian era uno de los seis hijos de Viviana, quien habita un humilde rancho de chapas por calle Cavia, a unos 40 metros de Washington y cerca del Puente Negro, esa vieja pasarela que antaño usaban sólo los carreros sobre el arroyo Ludueña y que puede apreciarse desde calle Sorrento. El resto del paisaje lo completan zanjas pestilentes a cielo abierto, ramilletes de cables colgados de la red y niños jugando sobre el escueto mejorado de la calle.

"Lo tuve que echar"

Viviana espera a la prensa en la puerta de su rancho resuelta a hablar. Y si alguna vez temió, ese día ya pasó. "Vos cerrá el pico", le gritó a un joven vecino que pasó con su carro tirado a caballo y algo le dijo a la doña. "Vos te drogabas con mi hijo y también vendías para Juan", le recriminó la mujer mientras sus hijas trataban de calmarla. El carro se estacionó dos casillas más adelante de la de Viviana y le sumó público extra a la charla con la mamá de Brian. "Yo a mi hijo lo tuve que echar (de la casa) porque me robaba para comprar drogas. Después lo dejé que se hiciera un ranchito en el patio de adelante de casa (con techo de lona). Pero ahí también solían venir a drogarse otros pibes", explicó la mujer.

De acuerdo al relato de Viviana, alrededor de las 4 de la mañana Brian estaba junto a varios de sus compinches en Washington y Cavia. "Se vé que lo mandaron a comprar al búnker que está allá al fondo (por calle Washington) y cuando volvía lo salieron a correr tres en un auto negro. Le pegaron tres tiros y lo dejaron en la calle, tirado", describió la mujer sin pudor.

A la hora de describir el auto desde el cual partió el ataque indicó que era "redondito", similar a un Ford Ka o un Renault Clío. Los familiares de "La pelu" lo cargaron en un vehículo y lo trasladaron hacia el Hospital Alberdi. La gravedad de las heridas motivaron que directamente lo cargaran en una ambulancia y lo derivaran al Policlínico Eva Perón, donde ingresó directamente a quirófano. En medio de la cirugía falleció. Tenía tres disparos: uno en el tórax, otro en el abdomen y uno más en las axilas.