Un hombre se mantuvo dos semanas prófugo y fue detenido en la provincia de Chaco.

Después de escapar de la Justicia santiagueña durante dos semanas, detuvieron en Chaco a un vecino de Quimilí acusado de torturar a su esposa. La sacó al patio, la ató a un árbol desnuda, le tiró baldes de agua helada y la acuchilló en las piernas.

En su denuncia del 14 de septiembre la mujer, que convive desde los 14 años con Julio Jiménez y con quien tuvo cuatro hijos, aseguró que recibe "ese trato humillante" desde hace mucho tiempo, pero que ya estaba "cansada y avergonzada" de darle esa imagen a los chicos.

En cuanto supo que ella había acudido a la policía en busca de ayuda, Jiménez escapó y recién pudo ser detenido en las últimas 48 horas. El agresor fue acusado por la fiscal Mariana Baena por el delito de “lesiones agravadas por el vínculo”.