El Ministerio de Salud negó las acusaciones y sostuvo que la criatura nació sin vida. Investigan si hubo mala praxis.

El hospital público de Tartagal se vio envuelto en las últimas horas en un escándalo por una denuncia de mala praxis. Una pareja guaraní aseguró que su bebé nació prematuro y los médicos se lo entregaron decapitado. "Me dieron el cuerpo en una bolsita sin ninguna explicación, lo único que me dijeron es que se les fue la mano", detalló el hombre a los medios locales.

La mamá del bebé, Reina Velázquez, fue la encargada de comunicarle la dolorosa noticia a su esposo. Cuando el hombre volvió de comprar pañales para su hijo por nacer, ya había terminado todo y de la peor manera. "Fue brutal", sostuvo, la manera en que los médicos extrajeron al bebé.

La indignación se viralizó en las redes sociales mucho más rápido que lo que tardaron en llegar las explicaciones oficiales. Finalmente, a través de un comunicado, las autoridades del centro médico confirmaron el hecho y manifestaron que el caso ya está judicializado.
El director del hospital, José Fernández, dijo que “la cabeza del bebé prematuro quedó encajaba al momento de nacer y cuando se lo intentó extraer se produjo la decapitación". La criatura pesaba solo 700 gramos y se encontraba en la semana 22 de gestación. Al ser consultado sobre los motivos por los cuales no se le realizó una cesárea a la paciente, explicó que la mujer ya presentaba 11 centímetros de dilatación.

Los resultados finales de la autopsia y de los informes técnicos y médicos serán clave a partir de ahora para determinar las responsabilidades que pudieron existir.
Desde el Ministerio de Salud dijeron que "el bebé al momento de los hechos denunciados ya se encontraba sin vida" y que el criterio utilizado por los médicos era en esos momentos evitar riesgos para la madre.

 

se vio envuelto en las últimas horas en un escándalo por una denuncia de mala praxis. Una pareja guaraní aseguró que su bebé nació prematuro y los médicos se lo entregaron decapitado. "Me dieron el cuerpo en una bolsita sin ninguna explicación, lo único que me dijeron es que se les fue la mano", detalló el hombre a los medios locales.

La mamá del bebé, Reina Velázquez, fue la encargada de comunicarle la dolorosa noticia a su esposo. Cuando el hombre volvió de comprar pañales para su hijo por nacer, ya había terminado todo y de la peor manera. "Fue brutal", sostuvo, la manera en que los médicos extrajeron al bebé.

La indignación se viralizó en las redes sociales mucho más rápido que lo que tardaron en llegar las explicaciones oficiales. Finalmente, a través de un comunicado, las autoridades del centro médico confirmaron el hecho y manifestaron que el caso ya está judicializado.
El director del hospital, José Fernández, dijo que “la cabeza del bebé prematuro quedó encajaba al momento de nacer y cuando se lo intentó extraer se produjo la decapitación". La criatura pesaba solo 700 gramos y se encontraba en la semana 22 de gestación. Al ser consultado sobre los motivos por los cuales no se le realizó una cesárea a la paciente, explicó que la mujer ya presentaba 11 centímetros de dilatación.

Los resultados finales de la autopsia y de los informes técnicos y médicos serán clave a partir de ahora para determinar las responsabilidades que pudieron existir.
Desde el Ministerio de Salud dijeron que "el bebé al momento de los hechos denunciados ya se encontraba sin vida" y que el criterio utilizado por los médicos era en esos momentos evitar riesgos para la madre.

 

se vio envuelto en las últimas horas en un escándalo por una denuncia de mala praxis. Una pareja guaraní aseguró que su bebé nació prematuro y los médicos se lo entregaron decapitado. "Me dieron el cuerpo en una bolsita sin ninguna explicación, lo único que me dijeron es que se les fue la mano", detalló el hombre a los medios locales.

La mamá del bebé, Reina Velázquez, fue la encargada de comunicarle la dolorosa noticia a su esposo. Cuando el hombre volvió de comprar pañales para su hijo por nacer, ya había terminado todo y de la peor manera. "Fue brutal", sostuvo, la manera en que los médicos extrajeron al bebé.

La indignación se viralizó en las redes sociales mucho más rápido que lo que tardaron en llegar las explicaciones oficiales. Finalmente, a través de un comunicado, las autoridades del centro médico confirmaron el hecho y manifestaron que el caso ya está judicializado.
El director del hospital, José Fernández, dijo que “la cabeza del bebé prematuro quedó encajaba al momento de nacer y cuando se lo intentó extraer se produjo la decapitación". La criatura pesaba solo 700 gramos y se encontraba en la semana 22 de gestación. Al ser consultado sobre los motivos por los cuales no se le realizó una cesárea a la paciente, explicó que la mujer ya presentaba 11 centímetros de dilatación.

Los resultados finales de la autopsia y de los informes técnicos y médicos serán clave a partir de ahora para determinar las responsabilidades que pudieron existir.
Desde el Ministerio de Salud dijeron que "el bebé al momento de los hechos denunciados ya se encontraba sin vida" y que el criterio utilizado por los médicos era en esos momentos evitar riesgos para la madre.