Sucedió en el barrio de Liniers. Aún se investiga qué ocasionó el enfrentamiento.

Un oficial de la Policía de la Ciudad que realizaba tareas de prevención en el barrio porteño de Liniers protagonizó un tiroteo en la madrugada del sábado, con cinco delincuentes que, según transcendió, lo atacaron al descender de un auto y luego escaparon hacia el hospital Santojanni.

En la puerta del establecimiento, uno de ellos fue encontrado muerto en el asiento trasero del vehículo. Otros dos de los ocupantes del auto fueron detenidos en el centro de salud, mientras que otro de los cómplices se encontraba herido, por lo que fue asistido por profesionales del hospital y derivado a quirófano para ser intervenido quirúrgicamente, según informó TN.

Según transcendió, el episodio empezó alrededor de las tres de la madrugada del sábado, cuando el agente de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires se encontraba en la esquina de Patrón y Cañada de Gómez del barrio de Liniers, cuando -por motivos que se investigan- fue sorprendido por cinco delincuentes que circulaban en un auto Renault de color gris: tres de ellos se bajaron y comenzaron los disparos.

Fue así que se generó un tiroteo que finalizó cuando los agresores huyeron en el vehículo en el que circulaban por la calle Cañada de Gómez a toda velocidad, en dirección hacia el barrio de Mataderos. Pocos minutos después, fuentes policiales informaron que un efectivo de la Policía de la Ciudad que se encontraban de custodia en el hospital Santojanni avisó por radio que el auto con los delincuentes había ingresado a la guardia de ese centro de salud.

Efectivos de la Policía de la Ciudad detuvieron en ese lugar a dos delincuentes que descendían del auto y a otro que se encontraba herido dentro del mismo, mientras que uno de ellos logró escaparse. Al revisar el vehículo, los uniformados encontraron muerto a otro de los atacantes en el asiento trasero.

Sergio Auger, director general de hospitales de CABA, dijo a TN que “por suerte el episodio ocurrió en horas de la madrugada” dado que si hubiera sucedido en otro horario con más concurrencia de gente “alguien podría haber sido atropellado, o podrían haber ocurrido otras cosas con los mismos pacientes o personal de la guardia”.