Una amiga de Nadia Arrieta dijo que hace dos días quisieron violar a otra vecina a 15 cuadras.


Mientras se esperan los resultados de la autopsia de Nadia Arrieta, la mujer que fue degollada ayer en su negocio de Villa Tesei, se supo que el asesino se llevó de la escena del crimen el arma homicida, la cinta de embalar que usó para inmovilizarla y el celular de la víctima.

El fiscal a cargo de la investigación, Mario Ferrario, busca determinar si Nadia fue víctima de un ataque sexual, como sugiere el hecho de que la hayan encontrado en ropa interior de la cintura para abajo, así como también si hay en su cuerpo otras lesiones. Es decir, quiere saber si pudo o no defenderse.
"Ella trabajaba con la puerta cerrada porque hace unos meses le entraron a robar", contó esta mañana en TN una amiga de la joven asesinada, todavía sin poder creer del todo cómo terminaron las cosas. También mencionó que dos días atrás, a solo 15 cuadras de distancia de ese lugar, habían intentado violar a otra mujer. "Era un hombre que iba en moto y tenía un cuchillo", detalló.

Nadia tenía 31 años y desde hace cinco años trabajaba en el local ubicado en la avenida Pedro Díaz al 500, en donde pasado el mediodía de ayer un chapista vecino encontró su cuerpo en medio de un charco de su propia sangre. "Es un horror", sostuvo su amiga. "Se destruyó una familia hermosa".
En el lugar, la Policía Científica levantó varias huellas, objetos como una tijera que estaba al lado del cuerpo y muestras de posible ADN que serán peritadas para tratar de identificar al agresor. "Estamos analizando todas las hipótesis, pero en principio el robo pierde fuerza porque no encontramos el comercio revuelto ni detectamos faltantes, salvo el celular de la víctima, algo que puede ser un indicador de que el asesino conocía a la víctima", dijo a Télam un investigador judicial.