Hace 36 horas, la zona norte de rosario se encuentra subsumida dentro de un enfrentamiento criminal que pone en riesgo la integridad física de todos los ciudadanos
La zona norte de Rosario comenzó a teñirse de sangre, el sábado a la madrugada, cuando un integrante de la Súper-Poderosa banda del “Ema Pimpi” (protegida por el Narco-Comisario Alejandro Druetta) fue abatido por efectivos del Comando Radioeléctrico mientras éste cometía varios delitos.
El criminal asesinado es R. Fernández, socio de Sandoval e integrante de la banda homónima, que trafica drogas en toda la zona norte de Rosario y se disputan las calles con la otra Poderosa Organización que dirige el Ex Gobernador Antonio Bonfatti y que la regenta; Olga Beatriz “Tata” Medina.
Advertirán que los anuncios que les efectuábamos hace tres semanas, cuando les adelantábamos que se venían fines de semanas sangrientos estábamos en lo cierto y el aparato Narco-Socialista iba a profundizar sus internas Narcos por el control de la droga en la ciudad.
En realidad el golpe del último fin de semana es un capitulo más entre las disputas que sostienen Antonio Bonfatti y Miguel Lifschitz. Vale decir que Santa Fe está totalmente desprotegida y sus gobernantes avanzan sobre los derechos ciudadanos para acrecentar “La Caja Negra Narco-Socialista”.
Los incidentes comenzaron luego que la gente de Pimpi Sandoval se anotició del deceso de R. Fernández, hecho que produjo inmediatamente una respuesta en la red social Factbook, donde, Marcelo Fernández (hermano de delincuente muerto) publicó un artículo prometiendo venganza y así ocurrió, puesto que durante todo el día domingo los Narcos de la zona norte intentaron ocupar varias veces las Comisarías 30ª y 10ª a la vez que destrozaron más de cinco vehículos y rompieron vidrios y mampostería de las sedes policiales en cuestión.
Un hecho relevante fue el sepelio de Fernández, dado que desde la casa velatoria, hasta el cementerio de Granadero Baigorria, acompañó al cadáver una columna de criminales que al grito de venganza y tiros de grueso calibre, cuestión cumplida en horas de la mañana de hoy, cuando varios centenares de malvivientes destruyeron gran parte del parque automotor policial de la zona norte y los edificios policiales del lugar.
Más de diez efectivos policiales resultaron heridos y el propio Comisario Basualdo (titular de la Comisaría 34ª) sufrió graves heridas en momento que iba de refuerzo a la 30ª para asistir a sus colegas.
Las heridas de Basualdo, a quién le rompieron literalmente la cabeza demuestran la ferocidad con la que se desenvuelven los Narcos en Rosario, por otra parte confirma la impresionante liberación territorial que existe en la ciudad, dado que el fuego criminal supera al de las fuerzas del orden. También los Narcos dejaron un mensaje al 911 prometiendo poner tres granadas en la Comisaría 10ª.
Lamentablemente los medios de comunicación pagos ocultan toda esta realidad, situación que desfavorece la erradicación del problema en ciernes.
Finalmente apelamos al sentido común de nuestros lectores, así analizan los hechos reales y sacan sus conclusiones.
Mañana ampliaremos
