En la primera reunión del año, los gremios rechazaron un aumento del 18%, en cuatro cuotas y ajustable a la inflación 

 

Un mes antes del comienzo del ciclo lectivo comenzó ayer la cuenta regresiva, con previsibles diferencias entre el ofrecimiento salarial del gobierno bonaerense a los docentes y lo que pretenden los gremios.

En la primera reunión de negociaciones paritarias con el sector, como ya se venía anticipando, el gobierno de María Eugenia Vidal presentó formalmente la propuesta de un incremento salarial del 18%, a pagar en cuatro cuotas durante el año, y ajustado a la inflación.

Como una manera de amortiguar el esperado rechazo por parte de los maestros, en el encuentro de la Comisión Técnica Salarial se confirmó la incorporación de una cláusula que, en caso de que el índice inflacionario supere esa cifra, el sueldo se ajustará automáticamente.

La propuesta no fue aceptada por los dirigentes gremiales que concurrieron al encuentro, en el Ministerio de Economía bonaerense, en pleno centro de esta capital, lo que dejó una sensación de fracaso en la primera reunión de la paritaria docente bonaerense.

Aunque con distintos matices, los gremios descartan de plano el ofrecimiento, ya que anteponen un elemento que, hasta ahora, no es tenido en cuenta por los funcionarios: la pérdida del poder adquisitivo registrada durante 2016, y que ubican entre el 8 y el 10%, por lo que el reclamo de la recomposición salarial para el sector oscila en el 35%, es decir, el doble de lo que recibieron como propuesta.

"Está en manos de la gobernadora Vidal que el ciclo lectivo comience el próximo 6 de marzo", advirtió María Laura Torres, secretaria gremial del Suteba, al término de la reunión. Tal vez para evitar un impacto ante el previsible rechazo sindical, en representación del gobierno provincial concurrieron al encuentro funcionarios de segunda línea de los ministerios de Educación, Trabajo y Economía.

La dirigente docente enfatizó que el Frente Gremial considera "imprescindible que se convoque a la paritaria nacional docente", por lo que si esa instancia no se cumple, "estaremos ante las puertas de un conflicto". En tanto, indicó que "planteamos lo que perdimos de poder adquisitivo el año pasado, por lo que pretendemos recuperar lo que nos corresponde, para después sí discutir la pauta 2017".

Durante el encuentro, que se extendió durante algo más de una hora, no cesó de escucharse una ruidosa manifestación protagonizada por docentes frente a la sede del Ministerio de Economía, que exigía una mejora salarial más sustantiva.

Entre las partes se convino pasar a un cuarto intermedio para reanudar las negociaciones en los próximos días, aunque todavía no se definió la fecha. Tras la reunión, tanto el Frente Gremial como el gobierno de Vidal mostraron un endurecimiento de sus posiciones.

También se planteó en la reunión la necesidad de poner en la mesa de discusión, además de la cuestión salarial, otros temas relacionados con la actividad educativa, como la infraestructura escolar y la problemática de los cargos docentes.

La reacción gremial

René Cruz, vicepresidente de la Federación de Educadores Bonaerenses (FEB), explicó que no se aceptó la propuesta "porque el aumento propuesto significa $ 200 por mes y ni siquiera alcanzará para pagar los aumentos de energía eléctrica que se vienen".

En tanto, Alejandro Salcedo, secretario adjunto de la Unión Docentes de Buenos Aires (Udocba), señaló que "el gobierno dispone de fondos muy superiores como para mejorar la oferta". Reclamó como primera medida el blanqueo de todo el salario, y que ningún docente esté por debajo de la línea de pobreza. Indicó, además, que la propuesta oficial comprende una cifra inferior a los $ 12.000 de sueldo inicial para un maestro de grado.

Previamente a lo que se transformó ayer en la primera pulseada del año entre el gobierno bonaerense y los gremios docentes, en los últimos días los titulares de las carteras de Educación y Trabajo venían dando cuenta de la postura que adoptarían a la hora de comenzar a negociar con los gremios.

En tal sentido, el director general de Cultura y Educación, Alejandro Finocchiaro, dejó en claro que "lo que vamos a ofrecer es lo que podemos, porque no se puede ofrecer lo que no se puede pagar", por lo que "si los representantes sindicales van a actuar como gremialistas, es muy posible que cerremos un acuerdo".

Por su parte, el ministro de Trabajo, Marcelo Villegas, destacó que el gobierno de Vidal "hizo un esfuerzo muy fuerte, y estamos dispuestos a seguir haciéndolo", al tiempo que recordó que en diciembre se cerraron las negociaciones paritarias con gran parte de los gremios estatales para este año.

Sueldos

Margen para negociar

Los gremios docentes y el gobierno de María Eugenia Vidal se miraron a cara de perro en el primer round de las negociaciones por el salario docente en la provincia de Buenos Aires. Las dos partes mostraron posturas irreconciliables, aunque se descuenta que habrá nuevas instancias de diálogo antes del comienzo de clases, previsto para el primer lunes de marzo. El principal contrapunto es la diferencia entre el 18% ofrecido por el gobierno y el 35% que exigen los sindicatos, que procuran recuperar un retraso del 10% que se arrastra desde el año pasado. Cerca de Vidal son conscientes de que tan enérgica como su postura de mantener la oferta del 18% es su decisión de que las clases empiecen como sea el 6 de marzo. Un resquicio para la negociación.


Fuente: Diario "La Nación"