El oficialista interbloque Cambiemos solicitó una sesión especial con el fin de expresar su condena a la situación en ese país, aunque probablemente no cuente con el respaldo de la oposición 

Los diputados del PRO, de la UCR y la Coalición Cívica buscarán retomar la actividad legislativa, tras el virtual receso de Semana Santa y para ello pidieron una sesión especial a fin de condenar la sentencia por la cual el Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela, a la que luego se dio marcha atrás, se arrogaba competencias parlamentarias,

En el temario de la sesión, solicitada para las 16, los diputados incluyeron tres proyectos de declaración: tres de los oficialistas Eduardo Amadeo (PRO), Mario Negri (UCR) y Elisa Carrió (CC); y uno del opositor Sergio Massa (Frente Renovador).

Con matices, los cuatro proyectos expresan "repudio" a la sentencia que había tomado el Tribunal Supremo de Justicia de la República Bolivariana de Venezuela por la que se arrogaba competencias parlamentarias y suspendía en sus funciones a la Asamblea Nacional.

Otro punto en común es la exhortación a la Organización de los Estados Americanos a que aplique con la mayor celeridad posible los mecanismos previstos en la Carta Democrática Interamericana.

Más allá de incluir un proyecto del massismo, desde ese sector anticiparon que no participarán de la sesión ya que "nadie del oficialismo se comunicó para consensuar la convocatoria".

Desde el Frente Renovador, insisten en que "con acciones como esta Cambiemos sigue buscando la polarización (con el kirchnerismo)".

Sin el apoyo del massismo (37 integrantes), el oficialismo sólo podría conseguir entre 90 y 95 de los 129 diputados que necesita para iniciar la sesión, a partir de los 86 propios y de al menos 9 posibles aliados.

Con la anticipada ausencia del Frente para la Victoria (72 integrantes) y del bloque Justicialista (17); la convocatoria de Cambiemos aparece como destinada al fracaso, aunque al fin y al cabo podrán expresarse verbalmente en el recinto sobre el tema Venezuela, pero sin la posibilidad de adoptar decisiones formales.

El mismo escenario se daría un día después, cuando el oficialismo sólo bajaría al recinto si tanto el Frente Renovador como el Frente para la Victoria consiguen reunir el quórum para debatir desde diferentes posiciones y en sesiones espaciales pedidas por separado, sobre el conflicto docente.

Esa posibilidad aparece como poco factible en ambos casos, salvo que medie un acuerdo que les permita reunir el piso de 129 legisladores para iniciar cualquier debate en el recinto.