Hace 48 años, el tres veces electo Presidente, Juan Domingo Perón daba su último paso hacia la eternidad y legaba al pueblo Argentino un pensamiento liberador de Independencia Económica, Soberanía Política y Justicia Social
Nacido de la entraña criolla Argentina, Juan Domingo Perón, inscribió en la historia nacional las páginas más felices del pueblo Argentino, dotando al mismo de herramientas y derechos para alcanzar la felicidad y cumplir con el designio sagrado de la humanidad de libertad, Justicia y derechos.
Constructor de la “Nueva Argentina”, el General Perón realizó la obra mas trascendente del siglo XX, transformando a la nación en el motor del crecimiento regional, desde donde el mundo comenzó a conocer la “Tercera Posición”, filosofía de vida y nuevo estado económico mundial para satisfacer las necesidades del ser humano, diferenciándose de el dogma fisiocrático; Marxista/Capitalista, interponiéndole la realización de un nuevo modelo de vida donde el capital y trabajo comparten la conducción del nuevo orden ansiado.
Independencia Economía:
Independizar los recursos nacionales para establecer un modelo de autosatisfacción productiva que le permita a la ciudadanía progresar socialmente, incorporarse al estado de bienestar y poder producir lo que consume sin la necesidad de depender, de potencia alguna para desarrollarse libremente sin dependencia, cuestión que le permita al pueblo trazar su propio paradigma sin interferencia u condicionamiento de cualquier Potencia o Corporación.
Soberanía Política:
Decidir desde Argentina las políticas institucionales, económicas, culturales y sociales para el desarrollo del pueblo, sin interferencia alguna de las potencias extranjeras que tuerzan la voluntad de la ciudadanía. Asistir al empresariado nacional y Estado en el marco de establecer pautas racionales y estructurales en el desarrollo productivo/comercial de la industria, el campo, la ciencia y la exportación de nuestras materias primas y manufacturas para lograr una renta nacional que asegure la felicidad del pueblo. Negociar en favor de Argentina nuestros recursos, para que el beneficio del producto sea disfrutado por la ciudadanía. ¡Que la manguera de divisas chorree hacia adentro, acumulando el ahorro nacional para el crecimiento económico local equilibrando el acumulado de las corporaciones extranjeras que beneficia solamente sus balances!
Justicia Social:
No existe “La Empresa” sin empresario, tampoco “La Empresa” sin trabajadores, por lo tanto, la plusvalía debe alcanzar a los hacedores de esta actividad. Perón incorporó la Co-Gestión para definir el valor del trabajo, la propiedad y la renta. La participación obrera en la conducción de la empresa es un nuevo derecho que tarde o temprano deberá incorporar la economía mundial para zanjar las asimetrías existentes, puesto que la producción de riquezas deben tener un solo propósito; “La satisfacción humana en la explotación de los recursos existentes”. Los Derechos Laborales buscan equilibrar la discusión de la renta y dotar a los trabajadores con instrumentos que establezcan una mejor calidad de vida. También al Empresario de previsibilidad sobre la inversión y el sacrificio puesto al servicio de la sociedad.
Este es el legado de Juan Domingo Perón, tan simple, tan profundo. Como heredero de esta historia recuerdo hoy al General. Miguel “Pato” Villanueva. Argentino y Peronista.
