La WTA la apoya y denunció doble moral en el arbitraje en los partidos masculinos y femeninos. A la jugadora de los Estados Unidos le quieren cobrar 17.000 dólares porque llamó "mentiroso" y "ladrón" a un juez de silla 

 

La WTA denunció este domingo un doble rasero en el arbitraje en los partidos masculinos y femeninos, luego de que Serena Williams fuera multada por la mañana con 17.000 dólares por la Asociación de Tenis de Estados Unidos por su polémico comportamiento en la derrota ante la japonesa Naomi Osaka en la final del US Open.

Serena acusó más tarde en conferencia de prensa al juez de silla portugués Carlos Ramos de haber tomado una decisión "sexista" luego de sancionarla con un juego (2-6, 3-5 en ese momento) tras recibir tres warnings, el último de ellos por llamarle "mentiroso" y "ladrón".

La norteamericana recibió una primera advertencia por recibir órdenes de su entrenador, una segunda por romper una raqueta y la tercera por dirigirse en esos términos al árbitro, que no recibió el tradicional trofeo que se les entrega a los jueces después de la final.

Nueva York, AFP-NA.